El empleo está cambiando a gran velocidad, y Aragón no es una excepción. Cada vez más empresas buscan perfiles con cualificación en áreas técnicas, digitales y sociales. Sectores como el comercio, la industria, la atención a las personas o la hostelería necesitan profesionales formados, con habilidades actualizadas y capacidad de adaptación.
Un mercado laboral en transformación
Aunque sigue habiendo demanda en profesiones tradicionales, el tejido empresarial aragonés está apostando por nuevos modelos productivos y por la mejora de la competitividad. Eso se traduce en un aumento de ofertas laborales vinculadas a la tecnología, al trabajo en equipo, a la comunicación o a la gestión de procesos. Hoy, la inserción laboral depende tanto de los conocimientos técnicos como de la capacidad para aprender, colaborar y resolver problemas.
Formarse ya no es una opción: es una ventaja real
Las personas que deciden formarse no solo mejoran su currículo, sino que amplían sus oportunidades de acceso al empleo y aumentan su estabilidad a medio y largo plazo. La formación ofrece herramientas, confianza y una mirada más amplia sobre el propio futuro profesional.
Además, permite reconvertirse, crecer, avanzar o encontrar un trabajo más alineado con los intereses personales.
Formación y acompañamiento: el enfoque Ozanam
En la Fundación Federico Ozanam contamos con programas formativos orientados al empleo en estas áreas de crecimiento y diseñados para distintos colectivos: jóvenes que buscan su primera oportunidad laboral, personas adultas que quieren reciclarse profesionalmente o mayores de 52 años que desean reengancharse al mercado laboral. Cada itinerario formativo responde a una necesidad real del territorio y abre la puerta a nuevas oportunidades.
Cada persona necesita un camino propio. Por eso nuestros programas combinan competencias técnicas, habilidades transversales y orientación continua. Es una respuesta real a las demandas del mercado laboral aragonés.






