La plaza del Pilar acogió este jueves la I Muestra de Actividad Física para personas mayores, impulsada por el Ayuntamiento de Zaragoza. Una jornada festiva, saludable y participativa que reunió a cientos de personas usuarias de los Talleres de Envejecimiento Activo gestionados por la Fundación Federico Ozanam.
Durante toda la mañana, se sucedieron actividades como bailes en línea, sesiones de gimnasia adaptada, exhibiciones de taichí y yoga, así como diferentes propuestas lúdicas y de promoción de hábitos de vida saludables. Una muestra de lo trabajado en los 521 talleres distintos que se han realizado durante este curso, los cuales se engloban en tres grandes áreas: “Comunicación y Cultura”, “Expresión Artística” y “Salud y Calidad de Vida”.
La cita fue todo un ejemplo del impacto positivo que tienen los Talleres de Envejecimiento Activo en la vida de las personas mayores, promoviendo el bienestar físico, emocional y social, fomentando su autonomía e implicación en la vida comunitaria.
Para Consuelo Cester y María Teresa Mercadé, usuarias del Centro Pedro Laín Entralgo, estos programas no sólo repercuten positivamente en la salud física y cognitiva. “Aparte de mover el cuerpo, te relacionas con otras personas y haces amistades nuevas”, añadía María Teresa mientras Consuelo resumía los beneficios de estos talleres: “son buenos para todo”.
La Fundación Federico Ozanam, como entidad encargada de la gestión de estos talleres municipales, quiso poner en valor en este acto el compromiso y la participación activa de los más de 10.000 mayores que forman parte de este programa a lo largo del año. Unos talleres que, tal y como destaca el Ayuntamiento de Zaragoza, presentan un grado de satisfacción general que se encuentra entre 8,87 y 9,12, sobre 10.
